Cuando la ansiedad te roba el presente

¿Qué relación hay entre incertidumbre, control y ansiedad? A veces pensamos que cuanto más control tenemos de lo que pueda suceder, menos incertidumbre y con ello menos ansiedad. ¿Y si empezamos a aceptar que el futuro es incierto? Hay muchas cosas que sucederán como están previstas, pero otras muchas se escapan de nuestro control. Cuando desconocemos lo que va a pasar directamente empezamos a anticipar posibles cosas que podrían suceder, sin embargo, dentro de esas anticipaciones nos encontramos los pensamientos catastróficos. ¿Y qué es eso? Sería algo así como anticipar el futuro de manera catastrófica sin pruebas evidentes de que eso pueda suceder. En resumen, cada vez que la incertidumbre se presenta en nuestra vida, podemos tener una tendencia a querer controlar lo que podría suceder, nos anticipamos. Aquí comienzan a actuar este tipo de pensamientos que nos alertan de un posible peligro sin que realmente tengamos pruebas o evidencias de qué va a suceder. ¿ Cuál es el resultado de todo esto? La ansiedad anticipatoria. Presentar síntomas de ansiedad como: preocupación constante, irritabilidad, problemas del sueño, nervios, inquietud, tensión muscular, entre otros. Todo ello antes de que realmente el supuesto peligro ocurra. La ansiedad sin darnos cuenta nos estaría robando muchas cosas que suceden en nuestro día a día, estando continuamente en un estado de alerta. Todo ello hace que no estemos disfrutando en muchas ocasiones de pequeñas cosas que suceden a nuestro alrededor. Estamos continuamente imaginando el futuro, ello nos roba el presente.

¿Tiene solución?

Es posible que te estés preguntando qué se puede hacer para controlar esta ansiedad anticipatoria.

En primer lugar, identificar los posibles síntomas:

  1. Sensación de nerviosismo, inquietud o agitación.
  2. Temor a que algo terrible pueda suceder.
  3. Incapacidad para controlar los pensamientos negativos
  4. Respiración más acelerada.
  5. Sensación de que falta el aire.
  6. Problemas digestivos
  7. Cansancio
  8. Problemas de concentración
  9.  Tensión muscular.
  10. Sudar excesivamente.
  11. Evitar situaciones que provocan ansiedad.
  12. Mayor rapidez en las pulsaciones del corazón.

Lo recomendable es que acudas a tratamiento psicológico si esta ansiedad te está provocando muchos problemas o limitaciones en tu vida.

El tratamiento cognitivo-conductual es el más eficaz para este tipo de problemas, este tipo de tratamiento nos ayuda a cuestionarnos los pensamientos negativos que nos asaltan la mente, nos facilita el buscar alternativas o soluciones a los problemas que se nos presentan. La práctica de técnicas de relajación, así como el cambio en algunas rutinas de nuestro estilo de vida, podrían ayudarnos a estar en el presente y saber mirar al futuro con otra perspectiva, sin necesidad de recurrir de manera automática a los pensamientos catastróficos.

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